9 de abril de 2015

Para S


Este fue el regalo para alguien realmente especial. ¿El detalle? Un mp3 con 80 canciones que yo llamo para el alma. ¿Y la razón? Aquí la teneís. Espero que te gustase S.

Las canciones son nuestras bandas sonoras. Nadie tiene una vida sin música y todos tenemos esa canción que oímos y hace que se nos muevan solos los pies. O que te haga acordarte de ese alguien especial. Cada canción es un sentimiento, y cuando alguien las comparte contigo está abriendo su corazón. Y en eso consiste este regalo. En esta pequeña cosa azul van millones de recuerdos. Bueno, no millones, pero si unos cuantos, casi 100. Exactamente 80. Muchos recuerdos vienen de lejos y algunos no he podido ponerlos. Bien por las lágrimas que me hacen llorar o bien porque son demasiado personales. Y no es que no los quiera compartir contigo, al contrario, no hay nada que no comparta contigo. Es solo que merecen ser guardados para mejores ocasiones, o para personas tan especiales cómo tu y merecen esa privacidad. Espero que no te importe, pero necesitaba dejarlos al margen.

Hay canciones de amor y de desamor. Hay ilusiones pasadas y presentes, hay historias compartidas, hay sonrisas y hay lágrimas. Pero sobre todo, en ese mp3 hay vida. Casi toda mi vida está volcada en él para que siempre que escuches esas 80 bandas sonoras para el alma te acuerdes de mi. Alguna historia te la cuento ya, otras te las contaré y quizá otras queden en el olvido, aunque espero que su melodía te acompañe siempre.  Por ejemplo 22 de Taylor Swift empezó a sonar cuando yo ya casi abrazaba los 23…pero siempre tendré 22 en mi alma; como dice la canción: We just keep dancing like we’re 22… Hay muchísimas canciones que son versiones de una serie: Glee. Por supuesto te recomiendo verla. Yo le he dedicado 6 años de mi vida y me ha dado muchas risas, muchas lágrimas y por supuesto, muchísimas canciones. La mejor Don’t stop believing, porque da igual de donde vengas y donde quieras llegar, todo esfuerzo merece la pena: some will win, some will lose, some were born to sing the blues. Yo siempre intento pensar en mi como esa que canta el blues… Otras son de esas que necesitas cantar a grito pelado cuando un día te ha ido mal Here’s to us de Harlestorm es esa. Hay muchos días de esos del guapo bajado y la vida puteando que necesito decirles a todos que se vayan a la mierda. Y que se jodan, que a mí ya me han jodido bastante durante 24 horas… Y bueno también algunas me hablan de amor. Ya sabes que esto de las canciones cambia, que según como estas, con quien estas y con lo a gusto que llevas tu vida con esa persona las canciones se repiten en bucle. Ésta me la regalo mi abuelo favorito (por lo menos por ahora) por cortesía de su hermana. Le hizo tanta gracia el parecido con la realidad, que no hemos podido evitar que se convierta en nuestra banda sonora. Aunque espero conseguir muchas más a su lado, ésta siempre será especial y ya se ha ganado un hueco en mi corazón. Espero que también lo haga en el tuyo y que algún día sea también tu banda sonora. Y así fue de Julión Álvarez y su Norteño Banda cuenta, pasito a pasito que fue así, un poquito extraña la manera en que llegó y que voy a hacer si se robó mi corazón…

Así que nada, disfrútalo en soledad o rodeada de gente, pero ten cuidado, ya sabes que llevas encima una parte de mi vida, llena de historias, recuerdos, amigos y amores. Y por supuesto, felicidades pequeña.  
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